Carlos Magro: «los centros escolares no se cambian por decreto»

2019-09-03

El pasado 5 de septiembre tuvo lugar la primera actividad previa a la Fiesta de la Escuela Pública Vasca, que celebraremos en La Bastida, Rioja Alavesa, el próximo 7 de junio.

Carlos Magro, especialista en innovación educativa, ofreció la jornada formativa dirigida a familias y profesionales de la educación “Transformando las escuelas” en Baños de Ebro. Iniciamos la jornada con una charla, a continuación, nos dividimos en grupos de trabajo para debatir sobre temas de actualidad educativa como la organización del centro, la resolución de conflictos o la convivencia.

Sería imposible recoger en unas pocas líneas todas las ideas sugerentes que nos transmitió Magro en su charla. He aquí algunas de las ideas que nos pueden ayudar a reflexionar sobre los retos actuales de la educación.

EDUCAR EN UNA SOCIEDAD COMPLEJA Y DIVERSA

Magro opina que hemos encargado a la escuela una doble tarea compleja: transmitir unos valores, una herencia y una cultura, y al mismo transformar esa misma sociedad. Una sociedad por otro lado que se ha vuelto cada vez más compleja y diversa, complejidad que se refleja en las aulas.

Ofreció datos que reflejan esa complejidad: el 46% de los docentes españoles experimentan estrés diariamente. Ser docente es una tarea compleja, explicó, “laboriosa, paciente y difícil. Mucho más de lo que la gente cree y muchísimo más de lo que piensan los políticos”, como dice Francisco Imbernón en su libro “Ser docente en una sociedad compleja” (Grao, 2017).

NUEVAS FORMAS DE ENSEÑAR Y APRENDER

Magro explicaba que “las actuales tecnologías digitales, lejos de constituir simplemente una caja de herramientas, definen un nuevo entorno de aprendizaje que está ampliando el concepto de alfabetización, modificando nuestra relación con los contenidos, demandando nuevas formas de enseñanza-aprendizaje y difuminando las fronteras entre el aula y el hogar, lo formal y lo informal”.

Estas nuevas tecnologías plantean en su opinión tres grandes desafíos:

·Las trayectorias individuales de aprendizaje.

·La personalización del aprendizaje.

·La ubicuidad del aprendizaje y la falta de demarcación nítida entre los diferentes espacios físicos e institucionales en los que tiene lugar el aprendizaje.

EL RETO DE LA INCLUSIVIDAD Y LA EQUIDAD

En opinión de Magro nos encontramos aún muy lejos de la educación inclusiva, equitativa y de calidad para todas y todos. Según él tenemos la responsabilidad de garantizar el derecho a aprender de todas las personas. Esto pasa por garantizar una educación que no excluya a nadie, que sea capaz de ofrecer a todos y todas las máximas oportunidades para desarrollarse en todos los ámbitos de la vida, sean cuales sean sus características y particularidades.

Esto significa, en palabras de la profesora de la Universidad de Standford Linda Darling Hammond, un cambio drástico en la enseñanza, ir mucho más allá de la mera transmisión de información, de los exámenes al uso y las calificaciones. Transitar en definitiva hacia un modelo adaptado y flexible en el que el ambiente educativo pueda ofrecer una amplia gama de oportunidades de éxito.

Atender la diversidad lo cambia todo”, sentenciaba Magro: el currículum, la evaluación, TODO.

DE UNA EDUCACIÓN INSTRUCTIVA Y SELECTIVA A UNA FORMATIVA E INCLUSIVA

Este nuevo tipo de enseñanza debería, en palabras de Philippe Perrenoud capacitar al alumnado para “poder actuar eficazmente en toda clase de situaciones concretas, movilizando y combinando en tiempo real, y de forma pertinente recursos intelectuales y emocionales.”

La mejora del aprendizaje no pasa por prescripciones detalladas de los modos de enseñar: un currículum fuertemente prescrito, la generalización de exámenes, etc. “Los centros escolares no se cambian por decreto”, subrayaba Magro. “La transformación, la innovación y el cambio depende menos de leyes y reformas que de Proyectos de centro y de prácticas profesionales”, recalcaba.

El cambio debe estar basado en una cultura de la enseñanza que responda tanto a lo que las ciencias del aprendizaje nos dicen sobre cómo aprendemos, como al cambio de fines educativos que se ha producido en las últimas décadas desde una educación instructiva y selectiva a otra formativa e inclusiva.

EXPANDIR LA EDUCACIÓN

Magro subrayaba la importancia de abrir la escuela a otros agentes educativos: “es necesario recuperar una visión de la educación en sentido amplio, reconociendo la importancia creciente de otros contextos de actividad y de otros agentes educativos en las trayectorias individuales de aprendizaje, y repensar las funciones, los objetivos, y la organización y funcionamiento de las instituciones de educación formal”.

En su opinión, para personalizar los aprendizajes escolares es necesario introducir cambios en profundidad:

  • En el currículum escolar.
  • En la organización y funcionamiento de los centros escolares.
  • En la formación del profesorado.

No podemos seguir asumiendo que lo que ocurre dentro y fuera del aula sean dos entornos diferentes, separados y aislados entre sí”, afirmaba. “Necesitamos una educación expandida”, sentenciaba. Lo que significa salir del centro y dejar entrar a otros actores. “Expandimos la educación cada vez que trabajamos por proyectos, atravesando y mezclando las disciplinas, las aulas, los niveles, los alumnos. Más aún si esos proyectos sirven a la comunidad (aprendizaje servicio) y resuelven problemas o necesidades reales de nuestra comunidad”, explicaba.

RECUPERAR EL OPTIMISMO

Magro explicaba que aprender es más que nunca un asunto no circunscrito únicamente a unos espacios concretos (las instituciones educativas, las aulas), ni a unos tiempos (los de escolaridad, la educación formal), ni a unos ámbitos de conocimientos determinados (conocimientos declarativos, abstractos o factuales), ni solo a unas habilidades (las cognitivas), ni, por supuesto, a unos currículos o a unos programas formativos normalizados y estandarizados.

Si las instituciones educativas deben mejorar su capacidad interna para impulsar el aprendizaje del estudiante deben trabajar:

  • En la construcción de una comunidad profesional caracterizada por un propósito común, una visión y unos valores compartidos.
  • En un liderazgo colectivo y distribuido.
  • Por compartir las prácticas profesionales; por la confianza, el respeto y el apoyo mutuo; el trabajo en equipo y de colaboración; la responsabilidad colectiva y la apertura a redes y alianzas.

Acabó la charla con un mensaje de optimismo: “debemos recuperar un optimismo que hoy parece perdido. Lo que pasa por compartir los éxitos; por visibilizar la actividad de los centros e instituciones educativas y de sus docentes; por la creación de redes de docentes y de centros que favorezcan el intercambio de prácticas, problemas, dudas y proyectos”.

+ info:

https://carlosmagro.wordpress.com/

https://alea.eus/araba/1568287980420-errioxa-eskola-aldatu

https://alea.eus/araba/1568288430417-hezkuntzan-aldaketa-periferia